viernes, 20 de septiembre de 2013

Triunfo en Calzada de Oropesa

Una oreja de peso para Chicuelo, un novillo noble de Victor Huertas y muy importante para el al que toreo con clase, ritmo pero sobre todo muy despacio, se sintió torero y eso lo transmitió al tendido. Compartió cartel con un rejoneadores y los "mediáticos" Óscar Higares y Canales Rivera.






lunes, 16 de septiembre de 2013

Un paso por Las Ventas

Chicuelo de Hellin paso por la monumental dejando buen  sabor de boca a pesar de no poder saborear un triunfo redondo, la novillada titular fue remendada por dos ejemplares de la ganadería de Mollalta, uno de ellos le toco en suerte a nuestro novillero, noble y encastado pero sin terminar de permitir el triunfo al joven torero. El segundo de su lote de Fidel San Roman , el mejor presentado de la novillada, brabucon y muy brusco, pegando tornillazos al final de cada muletazo. El mal uso con los aceros le privo de saludar en el coso Venteño.
(fotografías- las-ventas.com)




jueves, 5 de septiembre de 2013

Triunfo y voltereta en Villalba del Rey

Tres orejas y rabo es el resultado artístico del joven torero en la provincia de Cuenca, un festival de don Antonio San Román bravo, encastrado y con un punto de nobleza a excepción del segundo novillo de Chicuelo de Hellin, manso, bruto, descastado, sin humillar...que con la espada dentro hizo hilo al novillero y le propinó una fea voltereta afortunadamente sin consecuencias. Al contrario que el primero de su lote, permitió ver en plenitud en el estado que se encuentra el torero hellinero, demostró que sabe torear con gusto y raza a la vez, algo que siempre le ha caracterizado. 



miércoles, 4 de septiembre de 2013

Nuevo triunfo en Pedrajas de San Esteban

Nuestro novillero sigue cosechando triunfos, esta vez en la localidad Vallisoletana de Pedrajas de San Esteban, fue el pasado día 1 de septiembre y se lidiaron reses de Hermanos Sánchez Herrero, buenos de presentación pero desiguales en comportamiento.
A Chicuelo de Hellin le salió un lote dispar, el primero manejable y encastado que permitio el lucimiento del novillero, desde el capote hasta la muleta, pasando por las banderillas, dio un gran espectáculo que puso al publico en pie, un pinchazo le privo de salir a hombros, pero la segunda estocada fue certera y el burel cayo sin puntilla.
El segundo muy complicado, con la cara por arriba siempre y sin obedecer a los cites ni del torero ni de su cuadrilla, lo lidio con soltura y obtuvo una gran ovación.